Prof.: Luciano Di Carlo
Lenguaje Artístico complementario:
Música
Actividad n°3
Actividades
1) Leer
atentamente los textos expuestos a continuación de las actividades
2) ¿Quién
compuso el himno nacional Argentino y por qué? ¿Cómo se lo denominó en un
primer momento?
3) ¿Quién escribió
la letra del Himno Nacional Argentino? Según tu interpretación, ¿qué mensaje
contiene el total de la letra?
4) ¿Qué compositor
hizo el arreglo final que interpretamos hoy en día en actos públicos y
deportivos? ¿en qué año se redujo la letra original hasta llegar a la letra que
se interpreta actualmente? ¿a través de qué decreto, en qué año fue llamado y
utilizado como Himno Nacional Argentino?
El Himno
Nacional Argentino es el himno oficial de Argentina, y uno de los símbolos
patrios de ese país. Fue escrito por Vicente López y Planes en 1812 y compuesto
por Blas Parera un año más tarde. Originalmente fue denominado Marcha
patriótica, luego Canción patriótica nacional y posteriormente Canción
patriótica. Una publicación en 1847 lo llamó "Himno Nacional
Argentino", nombre que ha conservado y con el cual es conocido.
Historia
Vicente
López y Planes, autor de la letra del Himno Nacional Argentino.
El 24 de
mayo de 1812 se presentó en la "Casa de Comedia" de Buenos Aires la
obra teatral "El 25 de Mayo", referida a la Revolución de Mayo de
1810, de Luis Morante. La misma terminaba con un himno escrito por el propio
Morante, al que el español Blas Parera había puesto música, coreado por los
actores. Uno de los espectadores, el porteño Vicente López y Planes, se sintió
inspirado y esa misma noche escribió la primera estrofa de un himno para
reemplazar al anterior.
El
Triunvirato entendió que debía darle al pueblo un canto nacional de mayor
importancia que el que hasta entonces se entonaba. En un oficio del 22 de julio
de 1812 dirigido al Cabildo de Buenos Aires, sugería a este que mandase a
componer "la marcha de la patria", para ser ejecutada al principio de
las funciones teatrales, debiendo el público escucharla de pie y descubierto,
así como en las escuelas al finalizar diariamente las clases.
La
Asamblea General Constituyente del Año XIII ordenó componer la letra del himno
con fecha 6 de marzo de 1813 y lo aprobó como "Marcha Patriótica" el
11 de mayo de ese año. Al día siguiente le encargó componer una nueva música a
Blas Parera. En una sola noche terminó la partitura.
En 1817,
Parera abandonó la Argentina, viviendo varios años en Río de Janeiro y
finalmente en España, donde murió. Sobre el exilio de Blas Parera se ha
especulado mucho, indicándose que partió del país a causa de haber sido
obligado a componer la música del himno; esta teoría carece de documentación
que la avale. El musicólogo Carlos Vega explica al respecto que "meses
antes de su partida, el gobierno argentino (recuérdese que el país estaba en
guerra) exigió a todos los españoles residentes juramento de fidelidad a la
patria naciente y morir por su independencia total, legalizando su adhesión
mediante una carta de ciudadanía. Podría ser que la adopción de la nacionalidad
argentina hubiera sido una imposición demasiado dura para el catalán, y acaso
la causa de su extrañamiento súbito".2
El
testimonio de un viajero de la época da una idea de la amplia aceptación
popular de la que gozaba el nuevo himno: En 1817, un diplomático
estadounidense, Henry M. Brackenridge, fue testigo de la extraordinaria
difusión que había tenido en el pueblo rioplatense la canción patriótica que la
Asamblea del año 1813 había consagrado como Marcha Nacional.
Brackenridge
viajaba en un pequeño barco desde Montevideo a Buenos Aires y, en el transcurso
de la travesía, escuchó las estrofas del himno coreadas espontáneamente por sus
acompañantes. El relato de Brackenridge, tomado de su libro Voyage to South
America (Viaje a Sud América), publicado en Baltimore en 1819, decía:
Por la
tarde, nuestros compañeros, después de beber un vaso de algo estimulante,
rompieron con una de sus canciones nacionales, que cantaron con entusiasmo como
nosotros entonaríamos nuestro ‘Hail Columbia!’. Me uní a ellos en el fondo de
mi corazón, aunque incapaz de tomar parte en el concierto con mi voz. La música
era algo lenta, aunque audaz y expresiva... Este himno, me dijeron, había sido
compuesto por un abogado llamado López, ahora miembro del Congreso, y que era
universalmente cantado en todas las provincias de El Plata, así en los
campamentos de Artigas, como en las calles de Buenos Aires; y que se enseña en
las escuelas como parte de la esencia de la educación de la juventud...3
La letra
era marcadamente independentista y antiespañola, como correspondía al espíritu
de la época. Tiempo más tarde la Asamblea del año XIII pide un
"arreglo" de la letra, para que el himno quedara más acorde con los
nuevos vientos que soplaban: Inglaterra se oponía vigorosamente a todo intento
de autonomía en las colonias de España, su aliada en la guerra contra Napoleón.
El embajador británico, Lord Strangford, hace saber al gobierno de Buenos Aires
"lo loco y peligroso de toda declaración de independencia prematura".
Desaparecen
entonces estrofas que anunciaban que "se levanta a la faz de la Tierra una
nueva y gloriosa Nación". Se infiltran, en cambio, conceptos monárquicos
tan en boga entonces, cuando los próceres competían en candidaturas de príncipes
europeos para gobernarlos: el príncipe portugués, el francés, el
italiano...[cita requerida]
No extraña
entonces el "ved en trono a la noble igualdad", afrancesamiento
relacionado con el propósito de coronar al duque de Orleans (aunque otros
autores señalan que los orleanistas no estaban a favor de la "noble
igualdad" de la Revolución francesa, sino más bien lo contrario, que eran
partidarios del Antiguo Régimen). O "sobre alas de gloria alza el pueblo,
trono digno a su Gran Majestad", estrofa desaparecida en la versión
definitiva. O "ya su trono dignísimo abrieron, las Provincias Unidas del
Sur".[cita requerida]
La música
del himno experimentó en 1860 una modificación encomendada al músico Juan Pedro
Esnaola, quien realizó una versión orquestada más rica desde el punto de vista
armónico.
Tenido por
Himno Nacional la Canción Patriótica de Vicente López y Planes, a través de un
largo período de la nacionalidad fue interpretada de acuerdo con el texto
original. Pero una vez desaparecido el furor de la contienda contra España, en
aras de un acercamiento político con esta, debido a numerosas críticas por
parte de representantes diplomáticos españoles, la canción nacional sufrió en
su enunciado una modificación de forma en lo relativo a aquella parte que pudiera
tener un concepto peyorativo para otros países.
Durante la
segunda presidencia del general Julio Argentino Roca, el 30 de marzo de 1900 un
decreto refrendado con la firma del Presidente de la Nación y de los ministros
Luis María Campos, Emilio Civit, Martín Rivadavia, Felipe Yofre, José María
Rosa y Martín García Merou disponía que:
"Sin
producir alteraciones en el texto del Himno Nacional, hay en él estrofas que
responden perfectamente al concepto que universalmente tienen las naciones
respecto de sus himnos en tiempo de paz y que armonizan con la tranquilidad y
la dignidad de millares de españoles que comparten nuestra existencia, las que
pueden y deben preferirse para ser cantadas en las festividades oficiales, por
cuanto respetan las tradiciones y la ley sin ofensa de nadie, el presidente de
la República, en acuerdo de ministros decreta:
Artículo
1°. En las fiestas oficiales o públicas, así como en los colegios y escuelas
del Estado, solo se cantarán la primera y la última cuarteta y el coro de la
Canción Nacional sancionada por la Asamblea General el 11 de mayo de
1813."
Desaparecieron
así las marciales referencias a "los bravos [argentinos] que unidos
juraron su feliz libertad sostener, a esos tigres sedientos de sangre [los
españoles] fuertes pechos sabrán oponer". También se quitó: "Son
letreros eternos que dicen: aquí el brazo argentino triunfó, aquí el fiero
opresor de la Patria [el soldado español] su cerviz orgullosa dobló".
Música
En 1813,
la Asamblea General Constituyente que regía la actual República Argentina
encargó a Blas Parera la composición de lo que sería la Marcha Patriótica, con
letra de Vicente López y Planes.
En 1860
Juan Pedro Esnaola realizó algunos cambios a la música basándose en anotaciones
manuscritas del compositor.
El 2 de
agosto de 1924 el Presidente de la Nación Marcelo T. de Alvear creó una
comisión constituida por Floro Ugarte, Carlos López Buchardo y José André, para
componer una versión oficial del Himno Nacional. Gracias al hallazgo de una
partitura en el Museo Histórico Nacional atribuida a Blas Parera, a la cual la
comisión introdujo arreglos, se pudo estrenar al público en el Teatro Colón el
25 de mayo de 1927. Sin embargo, debido a las críticas que trajo el "nuevo
himno", por medio de un decreto de septiembre de 1928 Alvear armó una
nueva comisión, en donde se aconsejó hacer una versión más fiel a la de Juan
Pedro Esnaola.45 Hoy en día, la versión vigente del Himno corresponde a la
transcripción realizada por Luis Lareta, que se ajusta a lo acordado el 25 de
septiembre de 1928 por el Poder Ejecutivo de la Nación. Ya en 1900 se había
reglamentado por decreto del Poder Ejecutivo utilizar una versión reducida de
la marcha para actos oficiales y públicos.
Por el
decreto número 10.302 del 24 de abril de 1944, esta Marcha fue aprobada como el
Himno Nacional Argentino.
Letra
original
La letra
que se corresponde con la versión original del Himno Nacional del año 1813 es
mucho más larga que la actual debido a su reducción a partir del año 1900.6
La primera
versión que se publicó tenía errores atribuibles a la imprenta.7
Además de
errores de ortografía ("imbasor" en vez de "invasor" en la
versión impresa, pero no en el manuscrito),8 un error particularmente
llamativo en la luz de conflictos posteriores fue "Buenos--Ayres se opone
a la frente de los pueblos ..." en lugar de "... se pone a la frente
..." de la versión original.9
A
continuación, una transcripción de la versión del 14 de mayo:
Himno Nacional Argentino
(Letra completa y corregida)
Letra: Vicente López y Planes
Música: Blas Parera
¡Oíd, mortales!, el grito sagrado:
¡Libertad!, ¡libertad!, ¡libertad!
Oíd el ruido de rotas cadenas
ved en trono a la noble igualdad.
Se levanta en la faz de la tierra
Una nueva gloriosa nación.
Coronada su sien de laureles,
Y a sus plantas rendido un león.
(bis)
Estribillo (con coro)
Sean eternos los laureles
Que supimos conseguir: (bis)
Coronados de gloria vivamos,
Oh juremos con gloria morir. (tris)
De los nuevos campeones los rostros
Marte mismo parece animar. (bis)
La grandeza se anida en sus pechos
a su marcha todo hacen temblar.
Se conmueven del Inca las tumbas,
y en sus huesos revive el ardor,
Lo que vé renovando a sus hijos
de la Patria el antiguo esplendor.
(bis)
Estribillo (con coro)
Pero sierras y muros se sienten
Retumbar con horrible fragor. (bis)
Todo el país se conturba por gritos
De venganza, de guerra, y furor.
En los fieros tiranos la envidia
Escupió su pestífera hiel. (bis)
Su estandarte sangriento levantan
Provocando a la lid más cruel.
(bis)
Estribillo (con coro)
¿No los veis sobre México y Quito
Arrojarse con saña tenaz? (bis)
¿Y cuál lloran, bañados en sangre
Potosí, Cochabamba, y La Paz?
¿No los veis sobre el triste
Caracas
Luto, y llanto, y muerte esparcir?
¿No los veis devorando cual fieras
Todo pueblo que logran rendir?
(bis)
Estribillo (con coro)
A vosotros se atreve argentinos
el orgullo del vil invasor.
Vuestros campos ya pisa contando
tantas glorias hollar vencedor.
(bis)
Mas los bravos que unidos juraron
su feliz libertad sostener
a estos tigres sedientos de sangre
fuertes pechos sabrán oponer.
Estribillo (con coro)
El valiente argentino a las armas
corre ardiendo con brío y valor:
El clarín de la guerra, cual trueno
en los campos del Sud resonó.
Buenos Aires se pone a la frente
De los pueblos de la ínclita unión.
Y con brazos robustos desgarran
Al ibérico altivo león.
Estribillo (con coro)
San José, San Lorenzo, Suipacha,
ambas Piedras, Salta, y Tucumán,
la colonia y las mismas murallas
10
del tirano en la banda Oriental.
(bis)
Son letreros eternos que dicen:
aquí el brazo argentino triunfó;
aquí el fiero opresor de la Patria
su cerviz orgullosa dobló. (bis)
Estribillo (con coro)
La victoria al guerrero argentino
con sus alas brillantes cubrió.
Y azorado a su vista el tirano
con infamia a la fuga se dio. (bis)
Sus banderas, sus armas, se rinden
por trofeos a la libertad.
Y sobre alas de gloria alza el
pueblo
trono digno a su gran majestad. 11
Estribillo (con coro)
Desde un polo hasta el otro resuena
de la fama el sonoro clarín. (bis)
Y de América el nombre enseñando
Les repite, mortales, oid:
Ya su trono dignísimo abrieron
las Provincias Unidas del Sud.
Y los libres del mundo responden
al gran pueblo argentino salud.
(bis)
Estribillo (con coro)
Letra
posterior al año 1900
A partir
del año 1900, oficialmente se interpreta solo la primera cuarteta de la primera
estrofa, la última cuarteta de la novena y el coro final del Himno Nacional
Argentino. La modificación del Himno fue hecha por decreto por el entonces
Presidente Julio Argentino Roca, entendiendo que algunas de las estrofas
mortificaban a España.
Himno Nacional
Argentino
Letra Vicente López y Planes
Música Blas Parera
Arreglos Juan Pedro Esnaola
¡Oíd, mortales!, el grito sagrado:
¡libertad!, ¡libertad!, ¡libertad!
Oíd el ruido de rotas cadenas;
ved en trono a la noble igualdad.
¡Ya su trono dignísimo abrieron
las Provincias Unidas del Sud!
Y los libres del mundo responden:
¡al gran pueblo argentino, salud!
(bis)
Y los libres del mundo responden:
¡al gran pueblo argentino, salud!
Y los libres del mundo responden:
¡al gran pueblo argentino, salud!
Coro
Sean eternos los laureles
que supimos conseguir: (bis)
Coronados de gloria vivamos,
¡o juremos con gloria morir!
(tris).
Introducción cantada
En las
tierras de Catamarca, La Rioja y Santiago del Estero (desde por lo menos la
década de 1950) se interpreta una introducción cantada cuya letra no es parte
de la original. En ella, los acordes iniciales, que en la versión oficial no se
cantan, son acompañados por la siguiente letra:
Gracias a Dios, suena ya la hora de
la libertad
Cesó la angustia y el dolor ya pasó
Elevemos las voces al cielo y que
nuestras almas tengan consuelo
Vamos muchachos en masa a la plaza
a cantar
los clarines nos invitan al son
militar de su alegre canción
las trompetas le responden
mirad como vienen mujeres y niños y
trotan caballos y
suenan tambores
y todo el mundo acude a la plaza y
no hay uno solo que
quiera faltar
Silencio y atención, atención.
Origen y controversia
Si bien en
un primer momento se la consideró de autor anónimo, una investigación posterior
reveló que esta letra fue escrita por Antonio Dellepiane en 1929 como parte de
un estudio histórico y artístico sobre el himno nacional.1516Al respecto
algunos autores han criticado esta letra por considerarla contraria al estilo y
espíritu del himno original, ajena a su concepción musicológica y cercana a la
ideología del nacional catolicismo.1718
No hay comentarios:
Publicar un comentario